La agencia espacial rusa casi ha perdido la esperanza de salvar a una nave espacial de 100 millones de libras que se dirigía a Marte, pero se pego un golpe hacia afuera poco después del lanzamiento.
Los ingenieros tuvieron tres días para arreglar un problema que provocaba que la sonda Phobos-Grunt se cerrara antes que las baterias abordo de la nave murieran para siempre.
Los motores que se suponía que lo impulsan en su camino hacia el planeta rojo no se encienden, y cualquier intento de corregir el fallo parecía condenado a desaparecer cuando los científicos admitieron que ni siquiera podían establecer comunicación con la nave.
Ahora que el plazo ha ido y venido, las baterias de Phobos-Grunt se quedarán sin vida y comenzara una órbita alrededor de la Tierra en decadencia hasta que las 12 toneladas de combustible peligroso que esta llevando haga una vuelta inoportuna e incontrolada a la superficie.
El portavoz de Roscosmos Alexei Kuznetsov, dijo que los esfuerzos para comunicarse con el no tripulado Phobos-Grunt no habían traído ningún resultado.
Leer en ingles en FUENTEMaEl 12Nov-2011
La sonda espacial Fobos-Grunt, ¿una espada de Damocles de 13,5 toneladas?
Según expertos espaciales y balísticos rusos, el área de la posible caída no controlada del aparato es enorme -desde los 51,4 grados de latitud norte a los 51,4 grados de latitud sur- e incluye las regiones más habitadas del planeta: los territorios de EE. UU., China, África, Australia, Japón, parte de Europa Occidental y Ucrania.
Según Ígor Lisov, experto de la revista rusa 'Novosti Kosmonávtiki' (Noticias de Cosmonáutica), si no ocurre un milagro que permita a los especialistas restablecer la comunicación con la sonda, su vuelo seguirá estando fuera de control, con lo que podría ser abatida con un misil antisatélite. "Se sabe que tanto China como Estados Unidos disponen de estos misiles", dijo Lisov.
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